09 - PSICOSIS Y PERVERSION NARCISISTA. VICISITUDES DEL DESPERTAR DE LA PULSION. Alberto Eiger

RESUMEN

El perverso-narcisista es una persona que alimenta su omnipotencia a expensas del narcisismo estructurador de otra persona. Su trayectoria, compulsiva con poco o ningún placer, busca calmar el desamparo y remediar la desorganización interna. El “otro” puede ser sólo una idea, una fantasía o una ilusión. Lo importante es que el perverso-narcisista suele utilizar por momentos tanto la intimidación como la designación de lo que el otro piensa, sabe o incluso es en su identidad. En el fondo desea apropiarse del fantasear, del vibrar vital. Quiere saber destruyendo.

En este artículo, que toma como base el cuarto capítulo de nuestro libro Le pervers-narcissique et son complice, estudiamos las manifestaciones perversas-narcisistas en el psicótico, que no es ciertamente la única estructura que los evidencia. Aparecen estas manifestaciones a la salida del brote psicótico. A veces se estabilizan como rasgos de carácter, que hacen pensar en la restitución evocada por Freud para explicar el origen de las alucinaciones y del delirio.

A fin de precisar el cuadro clínico tomamos como referencia las nociones metapsicológicas de dominio y de pulsión de dominio. Tal como Freud definió esta última en sus años maduros, aparece incluso previo a la libido: un encuadre de la relación de objeto. Definimos el dominio regresivo (para diferenciarlo del dominio funcional al servicio de la pulsión de vida) como una tentativa de freno o de apoderamiento de la pulsión del objeto. Los casos clínicos ilustran múltiples aspectos de la perversión en el psicótico: la seducción e inducción narcisistas, lo paradójico al servicio de la ideología de lo maldito, etc.